Que una película pueda conjugar tal cantidad de sensaciones, de emociones, hacerte pasar de la tristeza a la sonrisa, emocionarte con su banda sonora, dejarte admirado con su maestría a la hora de ser rodada, con la calidad de todos y cada uno de sus actores, no es nada fácil, y todo eso lo consigue Campanella con esta película.
A través de los recuerdos de Benjamín Expósito se trenza esta historia. De como la mirada de un cadáver le estremece casi tanto como la de su viudo, como hace de esa investigación una parte tan importante de su vida, y como intenta narrarlo, tras su jubilación, en una novela, que dé sentido a una existencía en la que nada parece tener un claro significado.
Ricardo Darín es el eje central de esta película, un Darín soberbio, sobrio, acompañado por una plantel de actores fantásticos: Soledad Villamil, Pablo Rago, Guillermo Francella . No es una sorpresa que el cine argentino nos regale películas de gran calidad, y , mucho menos, lo es que estas vengan de la mano de Juan José Campanella.
Pd: Esta semana "argentina" quedó bendecida anoche con el pedazo de concierto que dio Andrés Calamaro en Alicante, comienzo de una gira que no puedo dejar de recomendaros.
2 comentarios:
desde luego tio te me estas amariconando, vaya tela de pelis que me ves, con lo que tu has sido, una de naruto que eso si te ponea ti, que lo se yo, o en su defecto una peli guarra, y dejate de tontás, que hasta el cr9 sabe lo que es un pachocho, jejejeje
un abrazo tio
y porcierto, se me escapó un sms que no iba destinado a ti, creo que lo entendiste...jejeje
Jejejej, sí lo del sms estaba claro que no era para mí, ya que comatoso no estaba ,no..jejeje
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