martes, febrero 26, 2008

Los macarras de la moral




Leo estupefacto la siguiente notica en meneame: Recogida de firmas contra una tienda erótica.

Hace poco descubrimos esta tienda en la calle Luis Braille de Murcia capital.Su nombre, More More (The love store). Se trata de una tienda elegante, discreta, en la que una pareja cualquiera puede encontrar alicientes para mejorar su vida sexual.

Y mira tú por donde, que como cita textualmente el artículo:"ya son dos las parroquias en las que este fin de semana se han realizado advertencias a los feligreses contra este negocio y donde, además, se ha iniciado una campaña de recogida de firmas"...

Pues aunque no sea poeta, y mi verso sea incorrecto, aqui les dedico un soneto a curas y feligreses, que con tanto ingenio, velan por nuestro moral:

Rayos,centellas y lluvias de sapos
Proclaman a los cuatro vientos
Hasta a la calle llegan los sacrilegios
feligreses contra los pervertidos..alzaos!!!

Afirman refufuñando:
“esto con otros no nos pasaba”
Mientras azotan los malos vientos
Con injurias, calumnias y mentiras.

A Dios rogando y con el mazo dando
Ensuciando las mentes colectivas
El sexo es perjudicial e insano
Sentiremos los perjuicios en la otra vida

Cuando esta piel se coman los gusanos
Y en mis huesos orinen las arpías…
Yo bailaré en el monte sacro
A la salud de todas estas mentiras

Me rebelo ante este hecho
No me quedo indiferente
Que el verdadero mal lleva sotana
El que envidia, lamenta y atormenta…
El que sus prejuicios disfraza
De sermones, rezos y aves maría

lunes, febrero 25, 2008

Una de estatuillas y debates electorales...



Bardem ya tiene Oscar. Esta madrugada la ha ganado por su interpretación en “No es país para viejos”, la gran triunfadora de la noche, al haber conseguido también el Oscar al mejor guión, mejor director y mejor película. Bardem hace un papel excelente, y me alegro muchísimo de este reconocimiento, pero sigo creyendo que el Oscar lo debió haber conseguido por su soberbia transmutación en Reynaldo Arenas, que le llevó a ser nominado como mejor actor principal, y que incomprensiblemente se llevo esa piedra con cara que es Russel Crowe en Gladiator.

Me alegro también, por los hermanos Cohen. Unos tipos contracorriente, originales, con títulos excelente, que han logrado este Oscar quizá en su película mas impersonal, y es que , como ocurre tantas veces, parece premiarse más una carrera que el film en cuestión.

Por lo demás, resaltar el hecho de que el resto de actores principales que han ganado el Oscar son europeos también. Daniel Day Lewis, y una desconocida actriz francesa, Marion Cotillard, por su interpretación de Edith Piaf. Hasta la ganadora de la mejor película de animación que es “Ratatouille” no olvidemos que está ambientada en París…En fin, que parece que los americanos, en esta ocasión, han mirado más las virtudes ajenas en lugar de mirarse tanto el ombligo, como suele ser lo más usual..

Y, por cierto, esta noche tenemos más interpretaciones, dos importantes. Pero esas no van a recibir ninguna estatuilla, más bien vana a recibir vivienda durante los próximos 4 años en la Zarzuela(que tal y como están las cosas no es moco de pavo), y una legislatura entera para demostrar que las promesas electorales se las lleva el viento… Y es que esta noche tenemos debate, y ya sabemos que los políticos son muchas veces más comediantes que gobernantes u opositores…Que pena que no tengamos un Sarkozy en esta campaña electoral, que nos espetara a la cara eso de:”…Apártate pobre gilipollas”…Nos caería como una patada en los mismísimos, pero seguro que no serían tan hipócritas como muchos otros que aparecen en televisión prometiendo y prometiendo….

lunes, febrero 18, 2008

Sweeny Tood



Benjamin Barker era un excelente barbero, casado felizmente con una mujer preciosa, y feliz junto a la hija de ambos. Pero la envidia, y la atracción que el malvado juez Turpin sentía hacia la mujer, hace que Barker acabe en prisión injustamente condenado. Ahora, Benjamin Barker regresa a Londres con la única intención de cumplir con su sangrienta venganza. Esta es la premisa de la que parte la última película de Tim Burton, “Sweeny Tood”, un musical atípico por lo sangriento de su desarrollo.

El film rezuma espíritu “burtoniano” desde sus excelentes títulos de crédito. Con una fotografía excelente, y una banda sonora formidable, nos encontramos con una película en las que las canciones se suceden, desarrollando la narración de la historia de una manera muy fluida. No hay que olvidar que se trata de un musical, y que el 80% de la película encontraremos a los protagonistas cantando, y además de una forma más que solvente. Johnny Deep está excelente en su papel, pero la verdadera sorpresa de la película es Helena Bonham Carter, magistral tanto en su interpretación como en su vertiente cantora de la película.

Y, además, está la sangre. Mucha sangre que refleja el camino vengativo que emprende el protagonista, y que le introduce, junto a su obsesión, en un festín de cuellos cortados. Una película maravillosamente oscura, poética, y muy lúcida que nos devuelve al mejor Burton de los últimos años. Una película altamente recomendada, sobre todo si sois admiradores del estilo inconfundible de este gran director.

viernes, febrero 08, 2008

A veces toca...

Supongo que soy uno más de los millones de españoles que se encomiendan a la caprichosa suerte ,semana tras semana, junto a su boleto de primitiva, bono loto, euromillones, y demás loterías y apuestas del Estado. Y semana tras semana, cada vez que comprobamos que la ufana suerte se ha liado con otro, y nos ha dado calabazas, pensamos que la conjunción astronómica, los biorritmos, e incluso nuestro ying o yang, se alían estratégicamente para que los fin de mes sean siempre eso, colinas escarpadas cada vez más difíciles de escalar.

Pero mira tú por donde, ayer una musa caprichosa de la suerte decidió hacerme un guiño, y regalarme una combinación ganadora de la primiva de 5 aciertos. La de 6 hubiera sido sublime, pero vamos que se pilló un pellizquito, compartido eso sí, pero que bien valen unas vacaciones próximamente.

Así que desencantados de la suerte no desfallezcáis. Seguid buscando a esa musa de la suerte, semana tras semana, que a veces, como en todo, también nos dan un guiño, e, incluso, si se lo plantean, un beso en los labios.