Mientras un impronunciable volcán islandés llena de negros nubarrones el norte de Europa, e impide millones de desplazamientos en avión, aquí en España negros nubarrones salen de la Audiencia Nacional.
El volcán de la justicia española ha explotado negros nubarrones sobre la figura de Baltasar Garzón, escupiendo nubes de prevaricación, posibles pagos no justicados, escuchas ilegales y demás delitos. Seguramente Garzón se ha extralimitado en sus actuaciones, pero que detrás de las acusaciones esté un sindicato como "Manos libres", formado por la ultraderecha más vetusta de este país me provoca picores...igual que la sarna lo podría hacer.
También tiene gracia la posición del PP en este asunto. Garzón cuando procesaba a altos cargos del Psoe era poco menos que un héroe nacional para ellos. Cuando los imputados lo son por el caso Gurtel cambian las tornas, y el juez es poco menos que el Anticristo.
Los vuelos intercontinentales recuperarán su normalidad en unos días...veremos si los vuelos de la Justicia Española los recupera con tanta prontitud...
